5 preguntas para saber si tu organización es obsoleta por decisión propia
La obsolescencia es difícil de ser diagnosticada y muchos líderes tienden a no verla o no querer solucionar este problema dado que implica un “Gasto”; sin embargo, la realidad muestra que es todo lo contrario, necesitamos y debemos enfrentar esta evaluación de forma profesional y muy técnica.
Una de las principales herramientas es analizar los datos sobre los costos adicionales en los que se está incurriendo en mantenimiento, reducción de productividad, seguridad ó desmotivando a nuestros empleados, con esta información estaremos en la capacidad de evaluar adecuadamente cada salto tecnológico que necesitamos dar para continuar siendo productivos y rentables en este mercado cada vez más competitivo; si esto fuere poco, para garantizar la verdadera satisfacción de las necesidades de los clientes a los cuales servimos y a los que nos debemos.
El enfoque adecuado es brindar las herramientas adecuadas para cada fin, no debemos dejarnos guiar por las tendencias de “Ahorro de costos” sin evaluar los verdaderos efectos en la subsistencia de nuestra organización y su presencia en el mercado a mediano y largo plazo.
¿Nuestros clientes serán mejor atendidos?
¿Nuestros costos a mediano plazo serán menores?
¿Nuestros trabajadores estarán más felices y motivados?
¿Nuestros trabajadores aprenderán nuevas habilidades y con ellas seremos más competitivos?
¿Mejoraremos la retención de personal clave en nuestra organización?
Detente un poco y evalúa con profesionalismo y no te quedes obsoleto y fuera del mercado.
